“Pueblo chico, infierno grande”, es el manoseado pero certero refrán que define la realidad que está viviendo la comuna de Pinto, donde el mediático párroco, César Ortega, no sólo llama la atención por su gusto por las rancheras, sino que ahora también por una eventual venta ilegal de carne al interior de la casa parroquial, entre otros negocios.
Un reportaje de TVN emitido el miércoles levantó la polémica en el pueblo y al caminar por sus calles la conversación es una sola: la noticia de quien viste sotana y que merced a una serie de actos económicos, asegura haber generado cerca de 80 millones de ganancias para el templo.
“Yo siempre lo he visto como un hombre ameno, pero limpio, nada raro”, dice la pinteña Darlen Navarrete.
Edith Zenteno en tanto, desde su puesto de plantas en la plaza de la comuna, asegura que “no soy una mujer de iglesia, pero nunca he visto nada que me llame la atención”.
Sin embargo hay otros que cuestionan sus manejos económicos, como Ulises Sepúlveda, dueño de la Funeraria Renacer, quien detalla, tras contar su historia en el reportaje de TVN y repetirla ahora a LA DISCUSIÓN, que “desde hace un tiempo que está mandando a la gente a la Funeraria Río Viejo de Chillán, porque no le quise pagar una comisión a él”. Gruesas palabras que carecen de un fundamento empírico, a diferencia de su segunda observación: “vende carne en forma ilegal al interior de la iglesia”.
Dicha acción fue registrada por las cámaras de 24 Horas, programa que le consultó sobre el negocio, ante lo cual el sacerdote respondió que “no vendo carne, lo que hago es entregar unos novillos a una carnicería de Chillán y ellos lo llevan al matadero… es una forma de juntar recursos para la parroquia”. Esto pese a que aparece en la imagen comercializando tres kilos de carne que sacó desde una congeladora, donde además recomienda al cliente aspectos culinarios.
Con respecto a las palabras del dueño de la funeraria, sólo aclaró en la nota que “mi intención es que las personas tengan una buena atención”.
La polémica se suma a otra que desde hace unos meses vive Pinto, en torno a su Cuerpo de Bomberos. Para consultar sobre ambas LA DISCUSIÓN intentó comunicarse con el alcalde Fernando Chávez, quien no tenía cobertura en su celular. En tanto, se esperaba una respuesta por parte del obispo Carlos Pellegrin a la cuestionable situación, pero él, junto al párroco César Ortega, están en un retiro en Los Ángeles. Hoy podría existir un pronunciamiento.
FUENTE : Diario La Discusion
