Los
signos de avance en materia de obras viales se están notando, por lo
menos en lugares claves de acceso y salida en la intercomuna. Dos obras
relevantes en este sentido son calle Baquedano y Avenida O’Higgins.
Ubicadas en un sector estratégico para Chillán Viejo y Chillán,
precisamente entrada sur y al sureste, se trata de una conexión
relevante para el tráfico de camiones, locomoción urbana e
interprovincial, además del tránsito vehicular interno.
Ningún vecino protesta por el avance significativo que traerán estas
remodelaciones, ni si están bien planteadas o no, (tal vez sólo un
poco). No obstante el principal reclamo que se ha hecho sentir en
quienes viven a lo largo de la arteria de Baquedano es puntualmente el
colapso que han vivido con la intervención del eje.
“Sobre todo que las dos obras se estén ejecutando al mismo tiempo eso es
impactante para nosotros que vivimos acá”, menciona José Maldonado,
quien junto a más vecinos y vecinas hacen patente su molestia con la
situación, dejando entrever una nula planificación entre ambas obras.
Los tiempos de baquedano
Si uno visita hoy las obras que se están realizando en calle Baquedano,
una calle importantísima para muchas comunas de la Provincia de Ñuble,
como El Carmen, San Ignacio, Pemuco y Yungay; los trabajos que se están
realizando son de instalación de varios metros de colectores de aguas
lluvia, implemento urbano que en el sector no tenían. “Por eso es que
esta obra es tan importante, representa un avance para todo el sector”,
reflexiona Mauricio Ortiz, constructor civil e inspector técnico
municipal de la obra.
Respecto a los reclamos planteados por los mismos vecinos, en torno a
las molestias que han causado las obras, situación que se ha visto
doblemente aumentada con la remodelación del tramo 3 de Avenida
O’Higgins, el encargado asegura que “en cuanto a lo vial nosotros
tenemos desvíos definidos en O’Higgins, de hecho hemos realizado muchas
convocatorias informativas a los vecinos. Hace muy poco el 17 de abril
realizamos la última. Ahí claro, ellos realizaron muchas preguntas y los
más preocupados y reticentes fueron los comerciantes”, recuerda
Ortiz. Una situación que fue constatada por LA DISCUSIÓN en terreno.
Siempre quienes más resultan afectados en los cierres de caminos y
arreglos viales son el comercio establecido, he ahí la reticencia. Según
Ortiz, la explicación fue realizada sobre todo de aclarar los tiempos,
que no tomarán más 8 meses en sus dos primeros tramos.
El primer corte de tránsito que existe en Baquedano está entre la
Avenida O’Higgins y Paula Jaraquemada y contempla el corte total de la
vía. En tres meses existirá otro en el segundo tramo que comprende entre
Paula Jaraquemada y el puente Las Lajuelas. Acá el corte de vía será
parcial, por lo que habrá habilitación de media calzada. Pero estas
intervenciones y desvíos trabajados con la comunidad se ven aumentadas
con los trabajos en el tramo 3 de Avenida O’Higgins.
Dos comunas, cero planificación
“Acá lo que pasa es que estas son dos comunas distintas y los procesos
constructivos son distintos. Nosotros en Chillán Viejo con la aprobación
de los dineros que nos dio el GORE tenemos un tiempo de ejecución que
debemos cumplir”, acota el inspector técnico de la obra.
Intentamos contactarnos con fuentes de la Seremi de Vivienda y
Urbanismo, a cargo de la intervención en O’Higgins, pero no respondieron
hasta el cierre de esta edición.
Para los vecinos, una planificación intercomunal en deuda, donde se
abordaron dos trabajos dependientes entre sí y claves para la ciudad sin
coordinación. La idea de todos: primero haber terminado O’Higgins antes
de iniciar la remodelación de Baquedano y no intervenir dos calles
claves para la ciudad y al mismo tiempo.