Pero  la historia local del sector, no la reconoce por ser una de las   contadas estructuras añosas del lugar. Se cuenta otra historia, una que   dice que ahí nació Víctor Jara, el destacado cantautor nacional en la   década de los años 60' y 70' de la Nueva Canción Chilena y que encontró   la muerte en 1973.
 Hoy, la supuesta casa natal, está pronta a venderse.
   Hoy, la supuesta casa natal, está pronta a venderse. Juan  Tamarín es el dueño del inmueble, sabe de la historia que  arrastra la  vivienda ubicada en calle Renato Orellana, camino a la  Iglesia de  Quiriquina. Tamarín comenta que en la localidad su hogar se  conoce como  "el hogar de Víctor Jara".  Comenta que esta la consiguió  gracias a  una herencia de su familia y asegura que en ningún caso fue  propiedad  de la familia de Víctor Jara.
Tiene una teoría: él cree que es posible que el destacado folclorista haya nacido allí por coincidencia.
"He  conversado con gente antigua de la zona, incluso algunos  parientes, y  no tienen la claridad exacta del lugar de nacimiento de  Víctor Jara.  Aun cuando las especulaciones siempre han existido, ya que  en los  alrededores de Quiriquina, por ejemplo en un sector que se llama  Selva  Negra, siempre ha habido gente ligada a la agricultura de apellido   Jara; y eso hace suponer que pueda ser verdad el nacimiento del   cantautor acá en el sector y precisamente en la casa de la que soy   dueño", contó.   
   Juan  Tamarín explica que la casa siempre estuvo en la familia. Su  anterior  dueño también se llamaba Juan Tamarín, su padre, que falleció  el año  pasado; y su progenitor, recuerda, le relató que posiblemente la  madre  de Víctor Jara, Amanda Martínez, haya pernoctado unos días en la   vivienda.
"Esto,  por ser una propiedad grande, con muchas habitaciones, baños,  bodegas y  galerías, siempre se recibían personas que buscaban  alojamiento por  cortos periodos de tiempo, preferentemente por trabajos  esporádicos;  entonces, esta premisa también da para pensar que Víctor  Jara  efectivamente nació en mi casa", afirma Tamarín.
Y  cuenta la situación actual de la morada: "En estos momentos la  casa,  que no sufrió grandes daños para el terremoto, está arrendada;  claro  que los ocupantes ya están notificados de que el bien raíz lo  colocaré a  la venta a partir del 31 de diciembre por intermedio de un  corredor de  propiedades; aun cuando sé que hay personas interesadas,  entre ellas,  el centro Cultural Víctor Jara, que está haciendo nexo  conmigo a través  del alcalde de San Ignacio, Wilson Olivares, con el fin  de adquirir la  casa y transformarla en un museo y está, además, el  manifiesto interés  del concejal de la misma comuna, Patricio Chávez, aun  cuando son sólo  manifestaciones de interés, ya que no hay nada en  concreto", asegura.
  
   Margarita  Moraga es una vecina de Quiriquina que conoció a muchos  ocupantes de  la casa y cuenta que "los dueños de la casa eran tíos  abuelos míos, don  Juan Ramón Henríquez y la señora Mercedes Soto,  quienes al no tener  familia dejaban que llegara mucha gente de afuera,  familias completas.  Ellos eran una especie de papás abuelos de toda la  comunidad de  Quiriquina, que en esos años no era tan grande, entonces  eran los  padrinos de bautizo, casamiento y confirmación de todos. Nunca  había  menos de seis o siete personas viviendo con ellos, entre los que   estaban Juan Luis Tamarín, el que era ahijado de mi madrina, llegando a   la casa de unos doce años y convirtiéndose, más tarde, en el   administrador del fundo", recuerda Margarita.
  Sobre  el ilustre morador de la vivienda, ella afirma que es una  aseveración  difícil de comprobar: "Tengo recuerdos de reuniones  populares  efectuadas antiguamente alrededor de una fogata por un  sinnúmero de  trabajadores, los que cantaban y compartían, aunque no  podría afirmar  con claridad si Víctor era parte de esos grupos", cuenta.
canto libre
   
   Estrella  Monroy ha investigado en profundidad la vida y obra del  cantautor.  Ella es presidenta del Centro Cultural Víctor Jara. Ella  asegura que el  compositor de "Te recuerdo Amanda" nació en Quiriquina.
  "Lo  que sucede es que hay un sentimiento que uno advierte en la  gente, en  el pueblo, cuando uno conversa; esto tiene mucho que ver con  la  sensibilidad de lo que ha crecido nuestra provincia en torno a las   figuras artísticas. Víctor Jara se respira en Ñuble, en Chillán, en   Chillán Viejo, en Pinto, en El Carmen y obviamente en Quiriquina y San   Ignacio; hay una sensación en el ambiente que nos permite creer que su   fortaleza y brillantez artística nació en esta tierra. Él lo dice en sus   propias palabras y nos da las garantías de que esto no es un invento   nuestro, aún cuando no contamos con un documento que lo acredite.   También ese sentimiento que comparte su hija, Amanda Jara, que es muy   cercana a nuestra organización, la que apoya nuestra teoría, que nos   fortalece cada vez que se lo manifestamos y además nos irradia con su   personalidad y carisma, lo que nos demuestra que ella es heredera de esa   generación de Víctor nacida acá en la provincia de Ñuble", explica   Estrella Monroy.
  
   Este  estrecho lazo emocional entre el autor de "Plegaria a un  labrador" y  esta tierra, es lo que destaca Lucy Castillo, fundadora de  la primera  peña folclórica en Chillán, llamada La Carreta, que más tarde  pasó a  llamarse La Peña de Los Parra; ella tiene antecedentes de la  relación  del artista con su familia. 
"Él  venía a cantar a la peña al año de fundarse y era muy amigo de   nosotros, por lo que cada vez que concurría aquí se quedaba por varios   días. En ese tiempo nosotros traíamos cantores populares de los   alrededores y a Víctor le encantaba, él les recopilaba canciones y puedo   dar fe que él se sentía totalmente de Chillán", asegura. 
Te recuerdo amanda
Amanda,  la madre de Víctor, era una campesina y cantora de la zona;  ella fue  quien le inculcó el amor por la música, y por motivos  laborales, se lo  llevó a Santiago. Tenía 3 años cuando habría ocurrido  esto.
   
   Su  vida fue dura. Pese a todos los apremios económicos logró ingresar  a  la universidad. Entre 1956 y 1962 estudió actuación y dirección en la   Escuela de Teatro de la Universidad de Chile.
Lucy  Castillo recuerda que "gracias a su talento fue avanzando más y  más en  el mundo académico, y de hecho, cuando nosotros íbamos a la  capital,  nos quedábamos en su casa", asegura y subraya que "son pocas  las  personas que pueden decir que compartieron tanto con él, por  ejemplo,  recuerdo que nunca bebía alcohol y le agradaba compartir con  los  campesinos té o mate, porque a él le enriquecían esas tertulias, por   eso destacó la contribución cultural de aquella época de la peña, no   como ahora que se malentiende su verdadero aporte; antes había muchos   cuentos, adivinanzas, poemas, exposiciones, charlas y canciones", relata   Lucy.
  
   En  cuanto al debate de su lugar de nacimiento, Castillo  reflexiona y   dice que se han dicho muchas cosas: "Por ejemplo, se habla de   Quiriquina, pero yo creo que Víctor nació en sus alrededores, para los   campos, aunque también está la teoría de que nació en Santiago, ya que   fue bautizado e inscrito allá, pero por lo que él siempre decía, su   verdadera tierra era la zona de Ñuble, era donde él más se sentía   cómodo", asegura la creadora de la primera peña en la zona.  
  
  Hugo  Castillo, hermano de Lucy e integrante del grupo folclórico Los   Tarkas, destaca el compromiso social de Jara. "La primera vez que vino a   cantar a la peña fue el año 1967, un año después de empezar a   funcionar; y en esa fecha ya tenía figuración con temas como El   Cigarrito y La Cocinerita. La verdad es que yo no dejo de contar una   anécdota interesante y que lo retrata de cuerpo entero, con toda su   sensibilidad. Una vez, cuando estaba acá, mi hermano le dijo que fueran a   saludar a mi mamá y Víctor le respondió afirmativamente pero que lo   esperara un ratito. Fue entonces cuando buscó su guitarra para entonarle   algunas canciones, ya que le dijo: 'No puedo ir donde la mamita sin   cantarle una canción'", recuerda con emoción el folclorista.
"Yo  le tengo un profundo agradecimiento a Víctor por cuanto él nunca  se  olvidó de nosotros y a pesar de ser ya una figura connotada, siempre   nos invitó a tocar a Santiago para estrechar los lazos de amistad   sincera", declara Hugo Castillo.
Sobre  el lugar de nacimiento de Jara, Castillo cuenta que  "él  siempre dijo  que era de la zona, pero nunca tuvo claro dónde, creo que  él lo  desconocía, aunque yo tengo la impresión de que nació en  Quiriquina. A  pesar de ello, todos los indicios dan a esa localidad  rural como la  cuna de Víctor Jara, ya que muchos vecinos lo comentan y  además está la  casa donde él nació. Yo conocí al dueño, Juan Tamarín, de  100 años,  que falleció el año pasado, y él me corroboró que ese fue el  lugar de  su nacimiento", afirma convencido.
  
  Por  su parte, Wilfredo Valdés, ex alcalde de San Ignacio entre los   periodos 1992 y 2000, asegura que "hicimos unas averiguaciones porque   queríamos colocarle a la plaza de Quiriquina el nombre de Víctor Jara,   todo con la ayuda de la fundación de Santiago. Lo que tengo entendido es   que él nació en los alrededores de la zona y sus padres fueron   inquilinos. Más tarde se fueron a Santiago por temas familiares.   Nosotros como municipio nos quedamos con la versión de los vecinos más   antiguos y que dan más fuerza a nuestra tesis que hemos investigado y   que dice que Víctor Jara es oriundo de esta tierra", finalizó el ex edil   de San Ignacio.
    LO ÚNICO QUE TENGO
   ¿Víctor  Jara nació en Quiriquina? En la localidad creen que sí. Hoy  se  construye un liceo que lleva el nombre del cantautor y ya se preparan   para celebrar el martes el natalicio del afamado cantautor nacional.
En  Chillán, los amantes de la vida y obra de Víctor Jara tienen un   tesoro. Se trata de una entrevista que dio el cantautor en Moscú. Corría   1970.
  "Yo nací en el sur de Chile, en la provincia de Ñuble, es una   provincia muy lluviosa y también sacudida por terremotos. Mis padres   eran inquilinos de un fundo y mi madre fue la que me estimuló en la   música porque ella cantaba, en la casa siempre había una guitarra. Más   adelante, cuando yo contaba con unos 12 años y por razones de trabajo,   nos acercamos a la capital".
Fuente: http://quiriquina-2012.blogspot.com